Mientras le gritas a tu mujer, hay un hombre deseando hablarle al oído. Mientras la humillas, ofendes, insultas y degradas, hay un hombre cortejandola y recordandole que es una gran mujer. Mientras violentas a tu mujer hay un hombre deseando hacerle el amor. Mientras la haces llorar hay un hombre que le roba todas las sonrisas.
Cuánta razón en tus palabras y cuánta verdad, ojalá aprendan muchos de esos monstruos de tus buenas palabras.
Un abrazo!!
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Tan divina.. Gracias
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Es cierto.
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Pocos lo aprecian
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