No sé quién soy, pero sé como me siento y me perdono porque lo olvidé. Muchas veces olvido lo que valgo, pero sé no compararme. Puede también que no sepa donde estoy, pero sé que estoy en mí. No sé a dónde voy, pero si sé con quien voy. Tampoco sé curar una enfermedad, pero sé evitarla. No sé lo que es el amor en si, estoy aprendiendo, sin embargo sé que estoy feliz de su existencia. No sé lo que es el mundo, pero sé que es mío. En ocasiones no se como vencer, pero sé como escapar. No puedo evitar los golpes, pero puedo resistirlos, esos siempre enseñan. No puedo negar la violencia, pero puedo evitar la crueldad. En reiterados momentos no se lo que hago, pero sé que lo que hago me hace. No puedo cambiar a los otros, pero puedo cambiarme a mí mismo.